un viaje en metro

He viajado en el Metro de Madrid por casi ya 3 años y siempre hay algo nuevo, algo cambió. Es como ir a un sitio nuevo cada vez, con sus múltiples estaciones nunca terminadas ya que, siempre hay algo que arreglar o modernizar.

Es un lugar mágico donde encuentro seres de distintos lugares e inclusive de planetas. Se que suena gracioso pero una mañana cualquiera, no, hubiera sido cualquiera sino hubiera cogido el metro, volvamos, ese día, 25 de Octubre del 2008, alrededor de las 2:30pm estaba en el vagón que suelo coger y entra un personaje que me asegura ser de otro planeta. La gente lo mira y se ríe, supongo, pensando que es parte de algún acto preparado, pero NO!

Él simplemente se sienta a mi lado y mira a todos con cierta nobleaz y cuestionandome le pregunto: ¿Qué piensas?, a lo que me responde: "Pobres humanos, podemos vivir en su planeta, invadirlo si queremos y ellos nunca se darían cuenta hasta que sea demasiado tarde, todas estas personas no me ven como una amenaza porque piensan que no existo pero hay cosas que son ciertas, no importa si las crees o no."

Razonando un mmento me doy cuenta que tiene razón, ¿Por qué cuando vemos a alguien diferente le decimos "raro" o "loco"? ¿Por qué no creeríamos si algún día baja Jesus y nos dice que lo sigamos?

Yo creo que vivimos constantemente a mentiras, desiluciones, que ya no creemos en nada, ni en nosotros mismos.

Pueden haber alienigenas en la Tierra y nadie les creería hasta que hicieran algo que los seres humanos no podemos o esperamos que sean muy difentes a nosotros, tipo de color verde o azul.

Me da pena el mundo en el que vivo y sus pensamientos cerrados al cambio y lo nuevo, no sólo po los alienigenas sino a cualquier cosa, queremos lo seguro, lo conocido a arriesgarnos por algo nuevo y mejor.

Hoy digo: "Pobres nosotros"